CALIFORNIA – Un hombre de 29 años, identificado como Lorenzo Isaiah Haynes, ha sido arrestado bajo graves acusaciones de retención forzada y abuso sexual en el sur de California. Según el Departamento del Sheriff del Condado de San Bernardino, Haynes mantuvo a una mujer contra su voluntad durante dos semanas, obligándola a realizar múltiples actos sexuales.
El dramático evento culminó el sábado 25 de mayo, cuando la víctima, desesperada, logró contactar a las autoridades alrededor de las 9:23 p.m. desde un lugar en la cuadra 3600 de Riverside Drive en Chino. La mujer informó que se estaba escondiendo de Haynes, lo que llevó a una respuesta inmediata de los agentes del sheriff.
Los agentes localizaron el vehículo de Haynes e intentaron detenerlo, pero este decidió huir, iniciando una persecución a alta velocidad. Durante la persecución, un vehículo de patrulla del sheriff colisionó con dos automovilistas no involucrados, resultando en heridas para uno de los agentes, quien fue trasladado a un hospital local y posteriormente dado de alta.
La persecución se extendió desde el condado de Riverside hasta el condado de San Diego. Finalmente, el vehículo de Haynes fue deshabilitado, obligándolo a huir a pie. Las autoridades lograron arrestarlo en Escondido, tras una exhaustiva búsqueda.
Lorenzo Isaiah Haynes enfrenta múltiples cargos, incluyendo proxenetismo, tráfico de personas, diversos delitos sexuales, privación ilegal de libertad, secuestro y evasión de arresto que resultó en lesiones a un oficial. Actualmente, está encarcelado en el Centro de Detención de West Valley en Rancho Cucamonga sin derecho a fianza, debido a una violación de libertad condicional.
El Departamento del Sheriff del Condado de San Bernardino insta a cualquier persona que tenga información relevante sobre esta investigación a contactarlos al (909) 364-2000. La colaboración de la comunidad es crucial para asegurar que se haga justicia y prevenir futuros incidentes similares.
Este caso pone en evidencia la importancia de la vigilancia comunitaria y la cooperación con las autoridades para combatir delitos graves como el tráfico de personas y el abuso sexual. La rápida acción de la víctima y la efectiva respuesta policial han sido determinantes para la captura de un individuo peligroso, destacando la necesidad de mantenerse alerta y denunciar cualquier actividad sospechosa.